Yo me resisto,
en la calle de los ahorcados,
a acatar la orden
de ser tibia y cautelosa,
de asirme a la seguridad,
de acomodarme en la costumbre,
de usar reloj y placidez,
aventura a cuerda,
palabra pálida y mortal
y ojos con límites.
Yo me resisto,
entre las muelas del fracaso,
a cumplir la ley de cansarme,
de resignarme,
de sentarme en lo fofo del mundo
mortecina de una espada lánguida,
esperando el marasmo.
Yo me resisto,
acosada por silbatos atroces,
a la fatalidad
de encerrarme y perder la llave
o de arrojarme al pozo.
Con toda la médula
levanto, llevo, soy el miedo enorme,
y avanzo,
sin causa,cantando entre ausentes.
amelia biagioni
2 comentarios:
Me gusta leer a esta poeta. No creo en el dolor como una meta digna de ser perseguida (¡hay que entender a Blake!; Escrivá de Balaguer, el fundador del Opus Dei, fue un apologista del dolor...) Perseguir el dolor es propio de adolescentes que se niegan a crecer, a avanzar...
Perseguir el placer, el hedonismo, me parece propio de estúpidos, huecos, necios y egoístas.
Creo que la vida no tiene sentido, se lo damos nosotros. No es una causa. Supongo que por eso probablemente, a mí me gustan mucho los dos últimos versos.
Le mando un beso.
EN ALGO ME RECUERDA A ''YIYI CONSTENLA''.
CREO QUE EN SUS FORMAS, TAL VEZ EN ESA MELODÍA IMPURA Y DIFÍCIL DE LEER QUE A VECES SALVA ALGÚN VERSO CADENCIOSO, O ALGUNA RIMA EXTRAVIADA.
LO CIERTO ES QUE ME GUSTA ESTA POESÍA Y VOY A SEGUIR LEYÉNDOTE.
CEMENTO.-
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